El ministro de Relaciones Exteriores, Andrés Allamand, insistió en que para tener una tener "una migración ordenada, segura y regular, lo que corresponde es que las visas de trabajo se otorguen en el extranjeros".
De esta manera, el canciller llamó al Senado a rechazar las indicaciones propuestas por la oposición, las que abrirían la puerta a lo que se ha denominado "turismo laboral".
"El otorgamiento de las visas en el extranjero permite de alguna manera regular los flujos migratorios teniendo, por ejemplo, en cuenta cuál es la realidad laboral del país", argumentó Allamand.
"A la inversa, el llamado 'turismo laboral' que se puede expresar con las personas entrando como turistas y solicitando un cambio de su situación en el país o, como ha planteado ahora la oposición, embarcándose como turistas, pero que al momento de llegar, en la frontera, soliciten ese cambio de estatus es precisamente una fórmula muy negativa", detalló el secretario de Estado.
Según el canciller, el sistema de entrega de visas laborales en el extranjero "está funcionando adecuadamente". Y entregó cifras: "Desde el año 2018 se han solicitado 335 mil visas en el extranjero, 112 mil han sido aceptadas, muchas de las cuales -las personas que las han recibido- ya se encuentran en el país. Pero 130 mil han sido rechazadas, fundamentalmente por falta de antecedentes limpios. Y existen 89 mil visas que están otorgadas, pero que tienen que todavía llevar adelante procedimientos de estampado".
"¿Qué significa esto? Que incluso en las personas que solicitan su visa en los consulados, uno de cada tres no tiene las condiciones adecuadas para los efectos de ingresar al país. Por lo tanto, este es un sistema que está funcionando de buena manera y que debe mantenerse", reiteró.
Allamand planteó que las modificaciones que ha presentado la oposición a la Ley Migratoria están teniendo "efectos negativos, particularmente en lo que dice relación con los ingresos clandestinos".
Según datos de la Cancillería, solo en la frontera norte, en Chacalluta, se registraron 101 ingresos ilegales en junio, 137 en julio y 275 en lo que va de agosto. "Es decir, un aumento de más del cien por ciento", dijo.
"La Cancillería está trabajando con los países vecinos, haciendo los esfuerzos para que, en definitiva, todas las situaciones de ingreso irregular puedan detenerse. Ayer hubo un trabajo conjunto de la policía chilena con la policía peruana que impidió que un grupo de 47 venezolanos que pretendían entrar ilegalmente al país lo lograran", comunicó.
"Si desde el punto de vista legislativo se mandan señales equívocas en términos de que ingresar al país en forma irregular no va a tener ninguna consecuencia negativa, entonces por supuesto que el esfuerzo se hace muy difícil", sentenció el titular del Minrel.