En un partido de vuelta de semifinales que quedará en la memoria de los fanáticos del fútbol, Manchester City demostró su dominio absoluto ante Real Madrid al imponerse por 4-0, logrando así un resultado global de 5-1 en la serie.
El conjunto inglés se adueñó del encuentro desde el inicio y no dio tregua al Merengue. El primer tiempo fue un verdadero espectáculo de juego brillante y efectividad por parte del City. Los dos goles de Bernardo Silva fueron el fruto de una estrategia impecable: pases precisos, jugadas largas y un despliegue táctico que dejó sin opciones a su rival.
Pero no podemos olvidarnos de Real Madrid. Aunque no logró hacerse presente en el marcador durante la primera mitad, un potente disparo de Toni Kroos que se estrelló en el travesaño recordó a todos que los españoles no se rendirían tan fácilmente.
En el segundo tiempo, Real Madrid mostró su orgullo y decidió plantar cara al dominio arrollador del City. Tomaron posesión del balón y buscaron acortar distancias, pero el tercer gol de los ingleses, producto de un desafortunado desvío en la defensa del Madrid, prácticamente selló la serie.
Con un Real Madrid resignado, el argentino Julián Álvarez selló el 4-0 definitivo con una brillante definición tras un excelente pase de Phil Foden. Manchester City demostró su poderío y dejó en claro que llega a la final de la Champions League con todas las credenciales para enfrentar a su próximo oponente, el Inter.